viernes, 13 de enero de 2012

Objetivo "ojo de ave"

ojo de ave
 Al igual que el "ojo de pez" (un objetivo de gran angular con un campo de visión de 180º), existió el "ojo de ave" (que recibió su nombre debido a la visión de casi 360º que poseen las aves), pues es un objetivo con un angular de casi 360º.

Realmente no se trataba de un objetivo, sino de un adaptador que se acoplaba a otro objetivo. Su construcción era simple, un espejo convexo al final de un tubo transparente (cristal), el otro extremo se acoplaba a la cámara. El resultado era una imagen en la que aparecía el fotógrafo con su cámara y el resto del paisaje en 360º, excepto el que estaba oculto detrás del espejo y detrás del fotógrafo.

catalogo ojo de ave

Estaba pensado para acoplarse a un objetivo de 50mm y con capacidad macro, ya que el espejo convexo está a escasos 10cm de la lente, aunque dicha distancia podía modificarse un poco para tener un angular aproximado de 360º o de 180º pero siempre mirando hacia atrás, además precisaba de un diámetro de 58mm para su acople. Se construyeron pocas unidades debido a su poca demanda, ya que realmente solo servía para fotografía artística debido a la gran deformación que producía en la imagen.

miércoles, 11 de enero de 2012

Objetivos baratos

Uno de los complementos más caros de las cámaras réflex son los objetivos; la calidad y acabados de las lentes, los mecanismos de enfoque y estabilización, materiales que aporten resistencia y ligereza... contribuyen a aumentar su precio más de lo que desearíamos, lo que al final nos supone un "contra" bastante grande en su adquisición.

No obstante, existen alternativas a esos costosos objetivos que facilitan su adquisición a los aficionados. Es sabido que en la mayoría de las veces la reducción de precio conlleva una disminución de la calidad general del producto y en este caso no va a ser menos, pero una pérdida de calidad comparándola con los objetivos actuales. Antes de la existencia de los automatismos actuales en los objetivos, no había nada, es decir, todo era completamente manual, nadie se quejaba y el fotógrafo sabía hacer grandes fotos que, aun hoy en día podemos contemplar y admirar.

Es importante decir las carencias generales que pueden tener estos objetivos "baratos", pues puede influir en nuestra decisión; carecen de enfoque automático, de estabilizador, de CPU que ayude en la medición de luz y otros (lo que hará que necesitemos de un exposímetro), diafragma fijo en algunos modelos y las lentes no tienen el mismo tratamiento que las de los objetivos de mayor precio.

Teleobjetivo
Tele objetivo económico 650-1000mm
 
Donde mayor ventaja encontraremos al comprar uno de estos objetivos "baratos", es en los angulares extremos, tipo ojo de pez y supertele, con precios muy inferiores a sus equivalentes más caros.

Un ejemplo de ello son:
- Un supertele de 650-1300mm a un precio aproximado 255€
- Otro supertele de 800mm a unos 229€
- o un ojo de pez 8mm a 259€
Precios orientativos buscados por Ebay.

Entonces ¿realmente merece la pena comprar uno de estos objetivos? Pues como siempre hay que acudir al sentido común, para un profesional posiblemente no, ya que a parte de la pérdida de comodidades que no tienen tampoco tienen la luminosidad ni calidad que ellos precisan, pero para un simple aficionado a la fotografía, posiblemente sea una buena opción económica y, a un ojo "inexperto" le supondrá mayor dificultad encontrar poca calidad en la imagen tomada.

lunes, 9 de enero de 2012

Armadura para la cámara

armadura¿Una armadura? ¿acaso se va a pelear con otra cámara al estilo "duelo de caballeros de la edad media"? Bueno, pues casi... noooo, pero si que cumple la función propia de una armadura, proteger.

Las armaduras se idearon para los profesionales de exteriores, ya que sus cámaras estaban sometidas a roces, caídas, salpicaduras... y necesitaban de alguna protección extra para sus cámaras, por lo que surgieron las armaduras.

Las armaduras suelen componerse de tres partes protectoras, una para la pantalla, otra para el cuerpo y otra para el objetivo. Recubren la mayor parte de la cámara y parte del objetivo, donde se encuentra la lente. Suelen estar hechas de una material que absorbe los golpes (por lo general goma), reduciendo el daño que se pueda producir en una caída. Las principales ventajas de una armadura son:
  • Ayuda a proteger la cámara ante caídas y golpes, pero no hace milagros (entiéndase por milagro que se caiga desde un primer piso y no le pase nada).
  • Ayuda a protegerla de arañazos, roces, insectos... sobre todo la parte que se sitúa en el objetivo, que está diseñada tipo parasol cumpliendo todas las funciones de este.
  • Ayuda a protegerla de la lluvia fina, ya que por lo general, la mayoría de los botones suelen estar recubiertos por la armadura.
  • Mejora la ergonomía del agarre de la cámara, ya que al ponerle la armadura la cámara "engorda" por lo que el agarre mejora, además tienen un tacto menos deslizante que el de la propia cámara.
  • Como valor añadido, podemos decir que estaremos algo más tranquilos si prestamos la cámara.
En cuanto al precio, a partir de 40€ según el modelo de cámara. Uno de los inconvenientes es que su precio es algo elevado para ser un trozo de goma, pero siempre podemos comprar por Internet y encontrar precios mucho más asequibles, desde 25 euros. Otro de los inconvenientes que tienen las armaduras, es que deben ser para el modelo específico de la cámara, no vale el de otro modelo si no encontramos en nuestro, pero eso sí, una vez encontrado se ajusta como un guante.

En mi caso no he visto necesario adquirir una armadura, la verdad es que cuido bastante de mi equipo (que no es que me lo hayan regalado precisamente) y no le doy un uso tan extremo como para usar armadura, pero si fuera el caso y tuviera una cámara de más valor, sin duda alguna, casi a la vez que adquiero la cámara, también compraría una armadura.