miércoles, 17 de diciembre de 2014

5 regalos que no se deberían hacer en Navidad (a fotógrafos)

En el último post se dieron algunas ideas para regalar en Navidad, hoy diremos que no serían unos regalos certeros.
  1. Software para editar fotografías: Como ya he dicho en post anteriores, en Internet hay mucho software gratuito para editar fotografías y los pocos que merecen la pena comprar son muy caros. Si a quien vamos a regalar es aficionado a la fotografía, ten por seguro que ya tendrán algún software de su agrado, a no ser que especifique uno que necesite.
  2. Almacenamiento en la nube: Un a subscripción en alguna plataforma de almacenamiento on line puede que sea satisfactoria para nosotros, pero como regalo para otra persona, no. Hay que tener en cuenta que la subscripción suele ser por meses o por un año, una vez acabado el plazo, hay que volver a pagar otro plazo, cosa que la persona a quien se la han regalado puede que no este dispuesto hacer por los motivos que sean, además, le supondrá una molestia volver a descargar todos sus archivos una vez agotado el plazo.
  3. Marco de fotos digital: El marco de fotos digital fue una cosa curiosa que salió hace unos pocos años y que por lo que parece no tuvo el éxito que se pensaba. Es un dispositivo que gasta luz, pilas, ocupa espacio de enchufes, son pequeños (por lo general)... en definitiva, un dispositivo que dónde único puede resultar algo útil es el hall de una empresa para mostrar sus productos.
  4. Cámaras de segunda mano: No digo que no se deba comprar de segunda mano, pero para regalar es un riesgo, ya que la garantía es muy limitada y no sabemos si fallará al poco. Comprar una cámara de segunda mano es más adecuado para uno mismo, pues sabremos en todo momento el estado del producto.
  5. Cualquier accesorio no compatible: Resulta obvio, pero hay que con toda la buena fe del mundo regala algo que luego resulta ser incompatible con el dispositivo en cuestión. Lo mejor es informarse antes, ya que aunque se pueda cambiar, quizás el cambio resulte más caro y puede que hasta una molestia para la persona a la que se regala.
Por supuesto, todo lo anteriormente dicho es una opinión personal, pero que en general puede ser válida para buena parte de las personas, ya que creo que se aplica el sentido común

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