
Este post se me ocurrió un día después de llegar a casa (hace ya varios años, pero que por dejadez y olvido no lo había escrito) y ver que muchas de las fotografías no estaban bien enfocadas, ya que tenia prisa y utilice el modo automático total (ese que aparece en color verde y que se supone que las fotos las saca divinamente de la muerte para la envidia de tus amigos, si, ese). Podría decir que estaba justificada la impaciencia con la que saqué las fotos por el momento en el que estaba, tenía poco tiempo, pero había un paisaje bonito (que es lo que mas jode si te encuentras que las fotos no están enfocadas donde tú querías), pero siendo honestos, me dejé llevar por la comodidad y la confianza excesiva de los modos automáticos (que ojo, no digo que no sirvan para nada, pero si haces las cosas rápido y con poca luz, posiblemente no salga lo que querías). Después de aquello aprendí una lección, haz las cosas con calma y fíjate en lo que haces, y es por ello por lo que doy estos consejos:
Antes de seguir con los consejos, hay que señalar que existen dos tipos de desenfoque, el desenfoque de movimiento y el desenfoque por no ajustar bien el foco de luz. El primero sucede porque el objeto o la cámara se mueve en el momento de obturar, mientras que el segundo, sucede por no ajustar bien el foco (que es el que conoce todo el mundo).