Antes de seguir conviene recordar un antiguo post que publique hace algún tiempo "cómo limpiar el sensor", en él nos dice como comprobar si el sensor está sucio y como proceder a su limpieza, pero usando solo un sistema, uno de los pocos que había hace unos años, afortunadamente hoy hay más opciones e incluso trucos.
- Con la limpieza automática del sensor. Hoy en día, casi todas las cámaras traen este sistema, que básicamente consiste en un cristal delante del sensor, que lo protege del polvo, y que vibra muy rápido para que el polvo caiga de él. En términos prácticos, es efectivo si somos muy protectores con la cámara, en el cambio de objetivos, dónde la guardamos, etc, ya que el polvo que entrará será mínimo, pero ante motas de polvo gordas, grasa y otra suciedad más densa, es inútil.
- Soplador. Con el polvo que pueda entrar, abrir el espejo y la cortinilla (las cámaras tiene una función de limpieza manual del sensor que se encarga de dejar visible el sensor), poniendo la cámara boca abajo e introduciendo el soplador con cuidado de no tocar el sensor (ojo, un soplador sin cepillo, para evitar que el polvo residual del cepillo pase al sensor), soplamos y la propia fuerza del aire debería remover las motas de polvo gordas que hubiera dentro. Si el polvo estuviese sobre grasa, posiblemente no funcione este método. NOTA: NO USAR AIRE COMPRIMIDO, podría estropear algún componente del sensor debido a su baja temperatura.
- Con pinceles. El método clásico de limpieza, aunque realmente no son pinceles al uso, sino una especie de pala suave y flexible que pasa de una sola vez por el sensor. Un pincel húmedo con el liquido limpiador y otro que seco para terminar de limpiarlo y secarlo. Especialmente útil cuando tenemos manchas de grasa. ¿Y qué hacen manchas de grasa en el sensor? Por desgracia, perece que se está haciendo habitual, que a veces, los nuevos modelos de algunas marcas vengan con problemas de fábrica de exceso de grasa o aceite que cae en el sensor y dichas marcas lo justifiquen como algo normal y que se limpia fácilmente. También hay otros líquidos limpiadores que solo precisan una pasada de pincel, ya que están preparados para que se sequen muy rápido sin dejar restos.
- Alcohol isopropílico: Este alcohol se evapora casi al instante y está libre de residuos en un 98%. Un poquito de este alcohol y unos bastoncillos (recomiendo los que vienen en los kits de limpieza de lentes, que suelen estar preparados para que no se desprenda ninguna hilacha de algodón), son mano de santo para sensores muy sucios. También puede usarse los pinceles limpia sensores anteriores.
- Bastoncillo gelatinoso. Similar a un pincel, pero no tiene ningún pincel en su extremo, sino una especie de gelatina que no deja residuos a la que se adhiere el polvo que pueda haber en el sensor cuando hacemos contacto. Su funcionamiento es simple, lo ponemos en contacto con el sensor varias veces por donde esté el polvo y lo sacamos. Cada cierto tiempo deberemos limpiar el gel (o cambiarlo), por medio de unas pegatinas que pondremos en contacto con él, para traspasar el polvo del gel a dichas pegatinas.
- Cinta adhesiva Scotch Magic 810 Truco. Es un truco que descubrió alguien por ahí y que parece da buenos resultados a un precio muy económico, unos 3€. Solo usando ésta cinta adhesiva, no usar cinta americana, cinta adhesiva normal, de celo... porque podríamos quedarnos con el sensor en la mano o dejarlo lleno del pegue de la cinta. Por lo visto el pegue de esta cinta tiene la consistencia adecuada para que se pegue el polvo, pero no como para que ella se quede adherida en el sensor al despegarla. Ya hablamos por aquí de la cinta en cuestión.
- Aspiradora de coche Truco. Lo hice una vez y se me llevó las tres motas de polvo que había en el sensor. Estaba en el campo y tenía la aspiradora, así que probé y funcionó. No recomiendo usar la aspiradora de casa o la cámara puede que se nos meta por el tubo de la aspiradora a lo Alien 4, cuando el bicho del final sale por la rendija que había en la ventana de la nave antes de entrar en la atmósfera.
La variedad de alternativas existentes para limpiar el sensor, no significa que la hagamos cada 3x4 porque se puede y su limpieza sea rápida y despreocupada como si estuviésemos limpiando platos. Su limpieza es sencilla, pero requiere de un especial cuidado, ya que tratamos con componentes especialmente delicados y claves para obtener una buena fotografía y entre menos se toquen, mejor. El proceso que yo hago ante una limpieza de estas características y que puede servir de consejo es el siguiente.
- Limpieza del sensor con el propio sistema de la cámara (de hecho lo tengo puesto así en la cámara para cada vez que la encienda).
- Perilla sopladora si no se quitan con el sistema de la cámara. Suele funcionar muy satisfactoriamente.
- Si no se quita y es poco polvo (1 mota o 2) puedo sobrevivir retocando las fotos en esas partes, durante esa sesión y quizás la siguiente, si sé que las fotos no van a ser extremadamente importantes para mí.
- Si preveo que esas 2 motas de polvo puede molestarme en una sesión de cierta importancia o que ya se ha acumulado más polvo (cosa que no me suele suceder porque cuido bastante la cámara, objetivos y las condiciones donde hago los cambios), paso a la limpieza con pincel o con bastoncillo de gelatina. Aunque como ya hemos visto, tenemos una variedad bastante interesante en la que elegir nuestro método favorito.
Así que piérdele el miedo a limpiar el sensor si lo tienes sucio, siempre y cuando lo tengas en cuenta como un elemento sensible, pero no intocable. Te ahorrarás mucho llevándolo a limpiar a una tienda y adquirirás experiencia sobre el mantenimiento de tu cámara.
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